Género: Romántica
Año: 2020
Editorial: Ediciones Kiwi
Sinopsis
Ellos son Liv y Cal.
Se conocen desde siempre. Sus familias son amigas, o algo así. Se odiaron de niños, pelearon, se volvieron a encontrar. Discuten a menudo y viven todo como una competencia.
No pueden tenerse ganas. Por supuesto que no. Sería asqueroso. Prohibido.
Son Liv y Cal.
Están hechos para ver quién gana el pulso o cual de los dos consigue lanzar más lejos la pelota. Otra cosa sería ridícula.
No pueden comerse los labios hasta querer estallar en mil pedazos, ni mirarse con las ansias de meterse bajo las sábanas a crear trazos con su sudor.
Eso nunca.
Juntarlos sería encender la llama para ver el mundo arder. Ellos no pueden tenerse ganas. Sería imposible. Mucho menos enamorarse.
Ah, pero son Liv y Cal y la vida no parece dispuesta a hacerles caso esta vez.
Opinión
Esta lectura la he disfrutado poco a poco, la he leído sin prisas aunque con ganas de saber como acabaría, y... me ha gustado mucho.
Liv me parece una chica muy fuerte y capaz de hacer lo que sea por los suyos, sobre todo por su hermano, ese amor que se tienen me parece increíble.
Cal creo que necesita ser el centro de atención porque le falta ese cariño que su madre no le puede dar porque siempre está fuera trabajando y también porque ella tiene un carácter bastante peculiar, aunque él la adora.
Cuando juntas a Liv con Cal...todo explota, la tensión entre ellos se palpa enseguida, él la pincha y ella salta. Cuando las hormonas empiezan a revolucionarse es cuando mejor nos lo pasamos viendo qué siente cada uno y lo que piensa cuando ve al otro, es imposible que se gusten, si se han criado juntos prácticamente... ¿o si es posible?
Me ha gustado el final que tiene, creo que es un tanto abierto para que imagines como seguirá su vida, no es un final de cuento de hadas pero es bonito.
